Blogia
CC.OO. Xuventude Vigo

Recortes de prensa

14 de Abril, día da República

14 de Abril, día da República

Recordar para no olvidar…Recordar para aprender…Recordar para saber de donde venimos y proyectar adonde vamos…
Ramón Francisco González Hernández | Para kaos en la Red

www.kaosenlared.net/noticia/no-ha-marchao...que-hemos-echao

"No se ha marchao...que lo hemos echao..."

Cuentan los que escriben sobre el tema que en Madrid, el grito del 14de Abril de 1.931 al salir a la calle a festejar el triunfo relativo de las candidaturas republicanas en las elecciones Municipales –el poder de los señores feudales-terratenientes era aún muy fuerte y decisivo-el rey Alfonso XIII salía de España pero a escape…echado del trono…. Y de España…aunque otros estaban empeñados en decir aquello de que se ha marchado…

Esta pequeña, pero gran referencia, nos podría dar una pista de cuan importante es para todos los ciudadanos no sólo españoles, sino todos los demócratas del mundo, conocer, aclarar, dignificar, … y ante todo no olvidar esas paginas de la historia que tanto aportó al progreso de nuestro país en todos los terrenos… en la vida, en derechos para la mujer, en el acceso a la educación y la libre enseñanza., a la valoración científica frente a lo religioso y místico… a popularizar el teatro, las letras y las artes en general… al nivel de implicación social y política de los ciudadanos ante el avance, discreto en un principio, de los niveles culturales de la población…

Recordar para no olvidar…Recordar para aprender…Recordar para saber de donde venimos y proyectar adonde vamos…

Y ante todo, aclarar y repasar; contrastar y divulgar; enfrentar y comparar…tantas parcelas de la historia que fueron escritas en momentos tristes y oscuros para España como fue la larga noche del franquismo… donde tantos hombres y mujeres tuvieron que permanecer callados y que a pesar de ser muchos…no lograron “tumbar” un régimen impuesto por las armas y que entristeció a sus gentes y encontraron refugio enel fútbol, los toros y la pandereta.

Al igual que me contaba mientras paseábamos por un desolador margen industrial recién reconvertido para la convergencia, un entrañable amigo en Eibar-Guipúzcoa… sus abuelos le dijeron que allí, antes que en ningún lado, en el Ayuntamiento, izaron la tricolor republicana y se proclamó antes que en cualquier lado la república. Hoy ya es un tema extendido y conocido.

Igual podríamos hablar de tantos y tantos, de tantas cunetas, pozos, simas, mar fea… campos de concentración, lugares de tortura… de las Brigadas del Amanecer y del Anochecer… De los que amparándose en la camisa azul falangista… atropellaron a tantas personas que hasta el propio José Antonio se sentiría avergonzado de cómo utilizaron su pensamiento para abusar de sus vecinos, deudores, acreedores, etc…

Según me cuentan, víctima de ello fue por ejemplo mi abuelo paterno que por colocar la tricolor en su casa por las fiestas, fue acusado de subversivo por algunos vecinos interesados.

Ya mi abuelo por línea materna lo peleo en los sindicatos…en el pueblo de los pastores del sur: El Pinar en el Hierro…

y por lo de abuelos, tenemos hasta el fusilamiento del abuelo del Presidente Zapatero…

Si el cuerpo de Alfonso XIII (…que fue echado…) volvió a España y me parece lógico… aunque no sé si necesario… que menos que rescatar de las inolvidables sepulturas anónimas regadas por toda España a los hombres y mujeres que defendieron o simplemente vivieron, la libertad, en la Guerra General del Pueblo Español contra el Fascismo… y que hoy se nombra como la Guerra Civil… otro tema a aclarar por la historia…y de cómo vinieron tantos hombres y mujeres del mundo a defender la ilusión de un porvenir distinto: las honrosas e inolvidables para España y todos los antifascistas del mundo Brigadas del Amor… LAS BRIGADAS INTERNACIONALES…ejemplo imborrable de la memoria de la humanidad… no podría existir mayor amor y compromiso…

Claro que hemos superado muchas y tantas cosas… claro, faltaría más…y que la monarquía actual tiene poco que ver con las anteriores… y todos sabemos o deberíamos, que estamos avanzando hacia nuevas formas de Estado. Que vivimos en un País libre y amparado por un ordenamiento jurídico moderno. Pero quizás el hecho más convincentede que hemos caminado podría estar en haber visto hace apenas un par de años a las dos banderas desfilar juntas por las calles de Madrid ante el mundo (aunque lógicamente sus portadores no podían, no querían y no debían saludarse, cuanto menos abrazarse)… Aunque la bandera republicana siempre ha o­ndeado en España y en el mundo, pero esa vez fue la primera de manera oficial.

O ver retirada la vergonzosa placa que adornaba el Gobierno Militar de Las Palmas frente al Parque de San Telmo… o las estatuas con el burro y la jaca…retiradas de las plazas y calles…que aún hay que ir cambiando nombres, pero no para olvidar, no, al contrario, para recordar a los que trataron de acallar y olvidar. Esas, para aclarar y enseñar por ejemplo creando un museo (de los horroresquizás), y para nunca, nunca olvidar… que somos los nietos de los que perdieron la guerra in-civil… aunque el haber llegado al Estado actual de libertades, demuestra que no se perdió esa guerra que nunca debió acontecer… y que tanto dolor y desolación dejó para unos y para otros… para todos… 

Gran Canaria, y por el 14 de Abril de 2009.-

78 Aniversario de la proclamación de la II República Española. 

Ramón Francisco González Hernández

Nós parimos, nós decidimos.

Nós parimos, nós decidimos.

Artigo escrito por Jose María Mena, fiscal xubilado. Foi fiscal xefe do Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, e unha das personalidades máis destacadas e vigorosas da resistencia democrática antifranquista no  mundo do dereito. .

¡Obispos buhoneros!, clamaba, como en una pesadilla, el viejo poeta León Felipe. Han pasado muchos años desde aquellos tiempos. Algunos creían que, por fin, habíamos llegado al final de una larga historia, a un mundo acomodado y apacible, laico y culto, plural y tolerante. Pero, una vez más, reaparecen aquellos viejos personajes. Los que entonces señalaban como pecadores a los librepensadores, y anatematizaban el liberalismo, hoy condenan el laicismo. El lento y cauteloso camino de la legislación del divorcio, iniciado por una ley de julio de 1981, fue objeto de crispado enfrentamiento, todavía no aplacado. Ahora parece que, desde las ancestrales perspectivas reaparecidas, se considera un inminente peligro para la democracia que los trámites del divorcio dejen de ser lentos, complejos y caros, como lo son, por cierto, los de sus tribunales eclesiásticos. El matrimonio entre personas del mismo sexo, legalizado por una ley de julio de 2005, parecía desbordar su capacidad de santa indignación, como si se tratara de una norma de obligado cumplimiento. Pero las novedades legislativas que tradicionalmente provocan la mayor crítica y movilización de nuestros personajes son las relativas al aborto. La ley, de 5 de julio de 1985, desde su preparación hasta su puesta en práctica, fue siempre capítulo especial y preferente de agresión de las huestes episcopales. El primero de los supuestos de aborto voluntario despenalizado es el terapéutico: cuando sea necesario, dice el Código, para evitar un grave peligro para la vida o la salud física o psíquica de la embarazada y así conste en un dictamen emitido con anterioridad a la intervención por un médico de la especialidad correspondiente, distinto de aquel por quien o bajo cuya dirección se practique el aborto. Este supuesto era, en realidad, un clásico estado de necesidad. Por eso no se estableció ningún límite de plazos de embarazo, como se señalaron en los otros supuestos de embarazo derivado de violación o de previsión de nacimiento con graves taras físicas o psíquicas. Junto al supuesto clásico de grave peligro para la vida o la salud física de la embarazada, se introdujo el supuesto de grave peligro para la salud psíquica. Desde el principio se pensó que en esta previsión cabría alojar, sin demasiadas dificultades, los casos de aborto voluntario que no tuvieran otro cauce de despenalización, y estos resultaron, así, susceptibles de despenalización sin plazo límite del curso del embarazo. Sólo haría falta, en la práctica, la voluntad de la embarazada, y un médico que firmara un papel. Con este guiño se abría, tímidamente, una puerta trasera a mayores reivindicaciones o más radicales propuestas electorales. También desde el principio se pensó que el médico de la especialidad correspondiente, el psiquiatra, estaría en condiciones de emitir un informe sobre el grave peligro del embarazo, o del futuro parto, para la salud psíquica de la embarazada. La puerta trasera ya no era responsabilidad de los juristas, sino de los médicos psiquiatras, y de la laxitud o instrumentalidad que los legisladores esperaron de la ciencia psiquiátrica.

Posiblemente, las actuales limitaciones y ambigüedades de la legislación sobre el aborto no se deban tanto al temor a la censura eclesial como a la timidez de los propios legisladores (obsérvese que no digo las legisladoras), que creyeron, y creen, que con lo hecho basta. Por ello no está de más recordar la valentía con que se expresaba el preámbulo de la ley de los matrimonios homosexuales, afirmando que en forma alguna cabe al legislador ignorar lo evidente: que la sociedad evoluciona, y que, por ello, el legislador puede, incluso debe, actuar en consecuencia. Esta reflexión y autoexigencia del legislador es válida también para la realidad estadística, y humana, del aborto voluntario, que no deseado. Además, la experiencia nos enseña que frente a cualquier reforma legislativa que entrañe progreso, sea avanzada o aplazada y tímida, como la que comentamos, la santa indignación saldrá a la calle con todos sus efectivos, incluidos niños, señoras, padres de familia numerosa, y hasta clérigos y príncipes de la Iglesia con su traje talar, de reglamento, tocados con irreverente gorrilla juvenil.